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Preso de conciencia Loreto Hernández García celebra cumpleaños en prisión, condenado a 7 años por protestar el 11J

Loreto Hernández García, líder de la agrupación Yorubas Libres de Cuba, cumplió este sábado 53 años tras las rejas, y Amnistía Internacional recordó su situación como ejemplo de la represión a la que se enfrentan quienes luchan por un cambio pacífico en el país.

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Preso del 11J cumpl,e a53 años en prisiòn
Twitter | Loreto Hernández García, prisionero político del 11J.

Actualizado: Sat, 05/04/2024 - 14:50

Loreto Hernández García, líder de la agrupación Yorubas Libres de Cuba, cumplió este sábado 53 años tras las rejas, y Amnistía Internacional recordó su situación como ejemplo de la represión a la que se enfrentan quienes luchan por un cambio pacífico en el país.

Condenado injustamente junto a su esposa Donaida Pérez Paseiro por sumarse a las protestas del 11 de julio de 2021, ambos son considerados por Amnistía Internacional como Presos de Conciencia.

"Es un sacerdote yoruba y preso de conciencia. Condenado injustamente junto a su esposa Donaida Pérez Paseiro por ejercer sus derechos humanos pacíficamente en Cuba", publico Amnistìa Internacional.

La organización, con más de 10 millones de activistas en todo el mundo, insta a una Cuba sin represión, donde la diversidad de opiniones y la participación ciudadana sean respetadas y valoradas.

Hernández García, quien cumple una condena de 7 años en la Prisión de Guamajal, en Villa Clara, ha sido objeto de múltiples denuncias sobre el deterioro de su salud en prisión. A pesar de su delicado estado, marcado por enfermedades como la diabetes y la hipertensión arterial, las autoridades cubanas mantienen su encarcelamiento, ignorando los llamados internacionales a su liberación.

El caso de Hernández García no es un incidente aislado, sino parte de un patrón sistemático de hostigamiento y represión contra miembros de grupos religiosos independientes en Cuba.

Este fenómeno ha sido denunciado por cinco relatores de Naciones Unidas, quienes expresaron su profunda preocupación por las restricciones a las libertades fundamentales en el país, especialmente en los casos de Hernández García, Pérez Paseiro y otros activistas vinculados a la Asociación Yorubas Libres de Cuba.

Ante estas acusaciones, el régimen comunista cubano ha defendido su récord en derechos humanos, afirmando que garantiza la libertad religiosa y prohíbe la discriminación basada en creencias religiosas.